Antonio Aguirre, presenta el número 33 de la revista Graccuris
El miércoles se presentó el número 33 de la revista Graccuris en la que presentaron el estudio realizado para localizar la ubicación de San Miguel de arriba.
Antonio Aguirre, su director, hizo la presentación y comentó orgulloso que este año hace 10 años que él se hizo cargo de la revista y 30 que vió la luz por primera vez, allá por el año 1992 de la mano de Antonio García Calvo. Este número 33, está compuesto por 7 artículos que configuran uno de los tomos, con mas fotos de temas alfareños.
1º.- La cárcel y el cuartel viejo, por Charo Cordón Castillo.
2º.- Introducción al estudio de los antiguos poblamientos extramuros de Alfaro, por Joaquin Villaciervos Cebrián.
3º.- Aportación histórica de la construcción de la Colegiata de San Miguel, Alfaro 1562-1700, por Miguel Ángel Medel Carrascón.
4º.- Contribución al estudio sociológico-religioso de Alfaro en el año 1960, Manuel Izar, que fue parroco de la iglesia del Burgo.
5º.- Breve historia de las infraestructuras ferroviarias abandonadas en el término municipal de Alfaro, por Joaquín Villaciervos Cebrián.
6º.- Los órganos de La Rioja: Alfaro, José Santos de la Iglesia Ugarte.
7º.- Ayer y hoy, Alfaro, por Charo Cordón Castillo.
Ya a la venta en las librerías de Alfaro.
Tras la presentación de la revista GRACCURRIS-33, comenzó la charla impartida por Víctor López Ausin y Maite Serrano, pertenecientes a la empresa INGITER, empresa encargada de llevar a buen término la prospección del “Cerro de San Miguel de Arriba”. Una prospección que en 2019, Quique Melero, presentó a los presupuestos participativos, aunque no pasó la selección. Después se presentó a “La mesa de la cultura”, donde aquí convenció al alcalde y tras tres años es ahora cuando se ven los resultados. Tras explicar, como es el funcionamiento y la técnica de tomografía eléctrica, mostraron los diversos trabajos que han llevado a cabo por la geografía Española, y les sorprendió muchísimo como la prospección del castillo de Nalda, que seguido se excavó, no fallaron en ninguna de sus valoraciones, y es lo que esperan les pase en Alfaro, porque “SI EXISTEN RESTOS ARQUEOLOGICOS” que muy bien podrían tratarse de la iglesia de San Miguel de Arriba. Enseñaron todas las prospecciones que hicieron, y como se configuro el puzzle que presentaron y que confirmaron sus sospechas, “Haber, hay algo”, ahora toca a las autoridades destinar unos fondos para hacer unas excavaciones y poner nombre definitivamente a lo que se ha encontrado.